Ir de isla en isla en Grecia es una de las formas más emocionantes de pasar unas vacaciones. La emoción de visitar diferentes islas y sumergirse en sus distintas culturas permite disfrutar de unas vacaciones llenas de matices. Además, con la ayuda de Ferryscanner, es posible reservar billetes para una aventura de isla en isla fácilmente y con mucha antelación.
Sin embargo, limitar sus destinos es el truco para aprovechar al máximo su escapada de isla en isla por Grecia. Lo ideal es que unas vacaciones de siete días incluyan tres escalas. Además, las islas están aproximadamente a cuatro horas en ferry unas de otras.
Una de esas rutas populares y poco convencionales para viajar de isla en isla desde Atenas es la de Sifnos y Milos, en las Cícladas.
Primer día – Atenas
Atenas es un cómodo punto de partida y de llegada para planificar unas vacaciones en Grecia. La capital cuenta con excelentes conexiones aéreas con las principales ciudades del mundo. Además, es el eje central de todo el tráfico de transbordadores del país.
Es importante que el primer día de viaje lo pase en Atenas por dos razones. En primer lugar, en caso de retraso del vuelo, no perderá el ferry de conexión a Sifnos. En segundo lugar, en lugar de apresurarse, puede aprovechar el día para relajarse, superar el desfase horario y, posiblemente, visitar la atracción más famosa de Atenas.
La Acrópolis es un espectáculo para la vista. En lo alto de una colina de 156 metros de altura, la antigua ciudadela es visible desde toda la ciudad. El yacimiento consta de varios hallazgos arqueológicos, desde el Partenón y el Erecteión hasta la antigua Ágora de Atenas. El Odeón de Herodes Ático, un gran teatro romano, es uno de los favoritos de los turistas y escenario de numerosos eventos musicales.
Se tarda unas tres horas en pasear por la Acrópolis, que permanece abierta hasta tarde. La mejor hora para visitar el yacimiento es por la mañana o por la tarde. Combine su visita con una parada en el Museo de la Acrópolis. Un tesoro lleno de hallazgos antiguos, alberga más de 4000 artefactos. Además, el museo actúa como un escape lleno de conocimiento del duro sol de la tarde.
Segundo y tercer día – Sifnos
Comience temprano el segundo día de su viaje de isla en isla por Grecia y tome el primer ferry a Sifnos. El ferry sale sobre las 7 de la mañana y tarda unas dos horas y treinta minutos en llegar a la isla.
Sifnos es una escapada romántica que sigue estando por debajo del radar turístico. Al llegar, puede utilizar el servicio local de autobuses o, mejor aún, alquilar un coche o una moto para los dos días siguientes.
Una vez en la isla, hay bastantes cosas que hacer en Sifnos. Sin embargo, la atracción más popular es el impresionante monasterio encalado de Chrisopigi, situado en un islote cercano. En el interior de este pintoresco lugar de culto, encontrará una notable estatua de madera de la Virgen María.
Tampoco puede perderse un taller de cerámica durante su estancia en Sifnos. La tradición alfarera de la isla se remonta al año 3000 a.C. En Vathi, Atsonios Handmade Ceramics es una tienda familiar centenaria que vende cerámica decorativa y funcional con diseños modernos y tradicionales.
Los días pasarán volando si se tienen en cuenta las horas pasadas bajo el sol en la costa arenosa de la isla. La familiar playa de Apokoftas, cerca de Chrisopigi, y la más recóndita de Vroulidia, cerca de Hersonissos, son dos playas de visita obligada en Sifnos.
La comida local es una razón más para añadir Sifnos a su viaje de isla en isla por Grecia. Sifnos, cuna del célebre chef Nikolaos Tselementes, sorprende a sus visitantes con su deliciosa cocina regional. La isla es conocida, en particular, por la revithada y el mastelo. El primero es un guiso de garbanzos, mientras que el segundo es carne de cordero al vino. Cocinados a fuego lento en ollas de barro, ambos platos prometen sabores robustos para chuparse los dedos.
Cuarto y quinto día – Milos
El traslado en ferry de Sifnos a Milos dura menos de una hora. Los billetes para el trayecto durante los meses de verano cuestan unos 25 euros por trayecto.
Pequeña isla volcánica de las Cícladas, Milos es famosa por tener una playa para cada día del mes. Además, el árido paisaje de la isla, sus dramáticos acantilados y las aguas turquesas del Mediterráneo crean calas inolvidablemente pintorescas a lo largo de la costa.
Sarakiniko, a unos 4 km de Plaka, es la playa más popular de Milos, ideal para saltar desde los acantilados. Por otro lado, Agios Ioannis es una apartada franja de la costa occidental, a la que se llega en barco o por un camino de tierra.
En Milos, un día paseando por Plaka, la capital, promete muchas sorpresas. Desde bonitos cafés hasta iglesias y el museo del folclore, hay mucho que hacer y ver aquí.
Sin embargo, las Catacumbas de Milos son una excursión ineludible para los viajeros más excéntricos. Estos cementerios cristianos subterráneos datan del siglo I. Aunque pasear por aquí resulta un poco claustrofóbico, es realmente una experiencia memorable.
Ahora, antes de empezar a hacer las maletas para la última etapa de las vacaciones, intente planificar medio día en Klima. Este pintoresco pueblo pesquero es mundialmente conocido por sus coloridas syrmatas, garajes tradicionales para barcos y casas excavadas en la roca junto al agua.
Día 6 y 7 – Atenas
El viaje de Milos a Atenas dura tres horas y media. Hay más conexiones diarias a El Pireo que a Lavrio. Una vez en Atenas, es hora de dejarse llevar por el encanto de la capital griega.
Como ya ha visitado la Acrópolis, dedique los dos próximos días de sus vacaciones en Grecia a descubrir las eclécticas atracciones de la ciudad. Para los sibaritas, una opción para disfrutar de la vibrante vida nocturna de Atenas es una ruta de bares. Si no, visite el Mercado Municipal Central de Varvakios a primera hora de la mañana. Con la mejor y más fresca comida de Atenas, el mercado es un bullicioso centro donde podrá observar a los lugareños y degustar deliciosos manjares griegos.
Ya que está al final de su viaje de isla en isla, es el mejor momento para darse un capricho. La parte más antigua de la ciudad, Monastiraki, aunque turística, es donde encontrará una gran variedad de tiendas tradicionales, puestos de recuerdos y cafés.
La historia de Atenas no acaba en la Acrópolis. Lo verá en todos los rincones de la ciudad. Por ello, otro lugar que visitar en Atenas para los amantes de la historia es el Museo Arqueológico Nacional, que alberga la colección más extensa de antigüedades griegas.
Para un toque de cultura, sin embargo, no deje de ir a la Plaza Syntagma. Sede del Parlamento, aquí se puede presenciar el famoso cambio de guardia, realizado con trajes tradicionales griegos.
Y si desea terminar sus vacaciones de una forma cinematográficamente romántica, diríjase al Cine París. Abierto desde la década de 1920, el cine de la azotea con vistas a la Acrópolis proyecta películas griegas y extranjeras y es una visita obligada en verano.