¿Sólo tienes tres días para explorar Tallin?
No hay problema.
Desembarca del ferry y al instante quedarás hechizado por los encantos del casco antiguo de Tallin.
La ciudad, con sus calles adoquinadas, sus torres de cuento de hadas y sus acogedores cafés, es un tesoro de maravillas por descubrir. ¿Quieres un consejo?
Comienza tu aventura desde Toompea, el punto más alto de la ciudad, para disfrutar de una vista impresionante y tener una idea clara de lo que te espera. En este artículo, te revelamos las 10 mejores cosas que hacer en Tallin en el transcurso de tres días.
Este itinerario combina lo mejor de la historia, la cultura y la modernidad, ayudándote a planificar un viaje sin estrés y lleno de sorpresas.
Sigue nuestras sugerencias y descubre todo lo que Tallin puede ofrecerte, ¡desde el principio hasta el final de tu aventura!
Tu primer día en Tallin comienza con una inmersión en la historia medieval de la ciudad.
Tu exploración comienza en el castillo de Toompea, una imponente fortaleza que domina la ciudad y ofrece una visión de la historia política estonia.
A un corto paseo, encontrarás la catedral Alexander Nevsky, una obra maestra de la arquitectura ortodoxa con sus cúpulas de cebolla y su interior ricamente decorado.
Después de visitar Toompea, aventúrate por las calles empedradas del Casco Antiguo (Vanalinn).
Aquí podrás perderte por las encantadoras callejuelas medievales, descubrir tiendas de artesanía y detenerte en los numerosos y pintorescos cafés.
No olvides explorar Raekoja Plats, la bulliciosa Plaza del Ayuntamiento, un lugar perfecto para relajarse y disfrutar del ambiente local.
Para terminar el día, sube a los miradores de Kohtuotsa y Patkuli para disfrutar de unas vistas espectaculares de la ciudad.
Desde estos miradores, los tejados rojos de Tallin se extienden hasta el mar Báltico, creando una vista de postal.
Es la forma perfecta de terminar tu primer día, captando la esencia de Tallin desde las alturas.
El segundo día en Tallin te lleva a descubrir la cultura y el arte estonios, entre las mejores cosas que hacer en Tallin.
Empieza el día visitando el Museo de Arte Kumu, el mayor museo de arte del Báltico, donde podrás explorar colecciones que van desde el arte clásico al contemporáneo. Después de saborear la rica historia artística de Estonia, dirígete al cercano Parque Kadriorg, un oasis verde en el corazón de la ciudad.
Aquí podrás relajarte entre cuidados jardines, tranquilos estanques y encantadoras fuentes, mientras admiras el Palacio de Kadriorg, una joya arquitectónica de estilo barroco.
Tras una mañana llena de cultura, es hora de disfrutar de la cocina local en uno de los restaurantes tradicionales del casco antiguo.
Prueba platos típicos como el kama, una mezcla de cereales locales, y el kiluvõileib, el famoso bocadillo de arenque báltico.
El ambiente auténtico de los restaurantes históricos de Tallin, con su decoración rústica y su cálida hospitalidad, te hará saborear las tradiciones culinarias estonias.
Por la tarde, dirígete a la Ciudad Creativa de Telliskivi, el vibrante distrito creativo de Tallin.
Este antiguo complejo industrial es ahora el corazón palpitante de la escena artística y cultural de la ciudad, famoso por sus coloridos murales, tiendas independientes, cafés hipster y locales de música en directo.
Pasea por galerías de arte, descubre obras de arte callejeras y déjate inspirar por la energía creativa de este barrio único, perfecto para terminar tu segundo día en Tallin.
El tercer día está dedicado a descubrir tesoros ocultos y aventuras únicas, perfectas para quienes buscan cosas que hacer en Tallin.
Empieza el día explorando el Museo de las Marionetas, un lugar encantador que celebra el arte de las marionetas y el teatro infantil, ofreciendo una visión de la creatividad y el folclore locales. Continúa después hacia el Museo de la Fotografía, situado en un edificio histórico que en su día albergó una prisión medieval.
Aquí podrás descubrir una fascinante colección de fotografías que narran la historia y la vida cotidiana de Tallin a lo largo de los siglos.
Después de explorar los museos, dirígete a las ruinas del Monasterio de Pirita y el Convento de Santa Brígida, situados a las afueras del centro de la ciudad.
Estos atmosféricos lugares son una de las cosas que hacer en Tallin para sumergirse en la historia medieval de Estonia, caminando entre piedras antiguas e imaginando la vida monástica de antaño.
El ambiente tranquilo y el paisaje circundante hacen de esta visita una experiencia memorable para los amantes de la historia y la naturaleza.
Por la tarde, aventúrate en el Parque Nacional de Lahemaa, una de las joyas naturales de Estonia.
Este parque nacional, a poca distancia de Tallin, ofrece una extensa red de rutas de senderismo a través de frondosos bosques, pintorescas cascadas y prístinos paisajes costeros.
Es un lugar ideal para relajarse y volver a conectar con la naturaleza, al tiempo que descubres los pueblos pesqueros tradicionales y las históricas fincas aristocráticas que salpican el parque.
Tras un ajetreado día explorando Tallin, regálate un poco de relajación en una sauna tradicional estonia.
Es una experiencia tradicional que no debes perderte.
Las saunas son una parte fundamental de la cultura estonia, y muchas de ellas incluyen la posibilidad de darse un refrescante chapuzón en el mar Báltico, perfecto para quienes quieran vivir una experiencia auténtica.
Es la mejor forma de terminar tu viaje a Tallin: rejuveneciendo cuerpo y mente después de tres días de aventuras y descubrimientos.
Si tienes unos días más o quieres añadir otra parada a tu viaje, considera la posibilidad de hacer una excursión de un día de Tallin a Helsinki.
Las dos capitales están separadas únicamente por el golfo de Finlandia, y los transbordadores conectan regularmente Tallin con Helsinki en poco más de dos horas. Es una gran oportunidad para explorar otra fascinante ciudad nórdica, famosa por su arquitectura moderna, sus animados mercados y sus saunas públicas.
Puedes encontrar y reservar fácilmente tu travesía en ferry en Ferryscanner, donde encontrarás varias opciones de horarios y compañías que se adaptan mejor a tu itinerario.
¡Es la extensión perfecta de tu viaje para descubrir aún más la belleza del Báltico!
Los ferries de Tallin a Helsinki operan varias veces al día, con una duración del viaje de unas 2-2,5 horas.
Los precios de los billetes de ida suelen ser a partir de 19 euros, dependiendo de la temporada.
Esta opción es perfecta para una excursión de un día, ya que te permite visitar fácilmente las dos capitales bálticas.
Tres grandes compañías de transbordadores operan la ruta entre Tallin y Helsinki: Tallink Silja, Viking Line y Eckerö Line.
Tallink Silja ofrece una experiencia de viaje moderna con salidas frecuentes y varias opciones de confort, como restaurantes, bares y entretenimiento a bordo.
Viking Line es conocida por sus tarifas competitivas y servicios para familias, con numerosos restaurantes y tiendas libres de impuestos.
Consulta los itinerarios de Viking Line para planificar mejor tu viaje y descubrir las maravillas del Báltico. Eckerö Line destaca por sus ofertas económicas y su puntualidad, que garantizan un viaje eficaz entre las dos capitales.
Las tres compañías ofrecen numerosas salidas diarias, desde primera hora de la mañana hasta la noche, lo que te permite elegir el momento más adecuado para una excursión de un día o una estancia más larga.
A lo largo de tres días en Tallin, podrás descubrir lo mejor de lo que ofrece esta fascinante ciudad.
Desde las estrechas calles del casco antiguo hasta las modernas zonas creativas, pasando por las maravillas naturales de las afueras de la ciudad. Hay muchas cosas que hacer en Tallin, y este itinerario está diseñado para proporcionarte una experiencia completa llena de cultura, sabor y aventura. Consejo profesional: No te pierdas nuestro artículo sobre los mejores lugares que visitar en Tallin para obtener una guía detallada de las atracciones imprescindibles de la ciudad.
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