Dublin

Todo Sobre Dublin

Dublín, la capital de Irlanda, es un destino poco convencional con una ciudad que sirve para todo tipo de personas. Dividida por el río Liffey en dos partes, ofrece al viajero apasionado una increíble visión de la historia, la cultura y estilo de vida irlandeses. Tomar un ferry a Dublín es fácil, sólo tienes que usar Ferryscanner para comparar compañías de ferrys y reservar tickets.

Una ciudad con un corazón de oro, la amabilidad de sus habitantes, hace que explorar Dublín sea aún más afable. La diversidad arquitectónica de los barrios, parques, museos, lugares históricos y una excitante escena culinaria resaltan aún más el irresistible carisma de Dublín, lo que se traduce en su creciente reputación como capital del mundo.

Rutas y Ferries a Dublin

Con conexiones de ferrys desde Inglaterra, Gales, la Isla de Man y Francia, llegar a Dublín en barco es un viaje inspirador, que promete un pintoresco comienzo de tus vacaciones en Irlanda. Cuatro compañías administran actualmente las rutas que llevan a los viajeros desde Liverpool, Douglas, Holyhead y Cherburgo a la capital. Los barcos de Irish Ferrys salen de Holyhead y llegan a Dublín en poco más de 3 horas. Entre su flota está el Ulysses, considerado el ‘mayor ferrys de carros del mundo’, con capacidad para transportar 2000 pasajeros y más de 1300 vehículos.

Stena Line tiene dos barcos que cubren la ruta de ferrys de Holyhead a Dublín, que se pueden reservar por medio de Ferryscanner. Los tickets flexibles para este viaje cuestan €32.50 de ida para un pasajero adulto a pie. Adicionalmente, Steam Packet Company tiene una salida a la semana desde la Isla de Man, mientras que Irish Ferries tiene tres desde Cherbourg.

Liverpool a Dublín es la otra ruta popular, operada por P&O Ferrys. Sin embargo, la compañía sólo permite pasajeros en carro en sus barcos. Debido a que Dublín se está convirtiendo rápidamente en una de las paradas favoritas de los cruceros, muchos turistas prefieren visitar la ciudad a través de los +100 barcos de recreo que atracan aquí cada año.

Los turistas extranjeros pueden volar rápidamente al aeropuerto de Dublín, situado a 10 km del centro de la ciudad. El aeropuerto cuenta con dos terminales muy concurridas que acogen varios vuelos Europeos, así como los continentales directos de Norteamérica y Oriente Medio.

Puertos

El puerto de Dublín tiene un legado de 300 años entrelazado con la transformación de la ciudad a lo largo de los siglos. Actualmente, es el principal puerto de Irlanda, con 1.9 millones de pasajeros que llegan cada año. El puerto de Dublín, que es un gran puerto con siete terminales, está a sólo 2.5 km de la ciudad, lo que lo convierte en un punto de entrada ideal al país. Los pasajeros de los ferrys que desembarcan en las Terminales 1, 2, 3 y 5, pueden tomar el Luas, Bus #53 o la lanzadera exprés para llegar al centro de la ciudad. Los auto-conductores deben tomar el Túnel de Dublín, que conecta con la autopista que lleva a distintas partes de Irlanda.

Dún Laoghaire Harbour, situado a 12 km al sur de Dublín, está a sólo 20 minutos en tren de la ciudad. Aunque puede venir algún crucero o ferrys, el puerto lo usan principalmente los clubes de yates y las embarcaciones privadas. El paseo marítimo que rodea el puerto es muy popular entre los ciudadanos que llegan aquí para dar un suave paseo y apreciar las notables vistas. En Ferryscanner puedes comparar fácilmente los precios de las compañías de ferrys y reservar tickets de ferrys baratos a Dublín.

Mejores Playas

Las mejores playas de Dublín se encuentran a ambos lados del puerto, situado en el centro de la Bahía de Dublín, que tiene forma de herradura. Aunque el tiempo en la región puede ser imprevisible, con un sol limitado, las playas son exclusivas y muestran un encanto irlandés inherente.

Dollymount Strand

Cruza el Dollymont Wooden Bridge hacia Bull Island, pasa por delante del Real Club de Golf de Dublín y estarás en el inicio de los 5 km de Dollymount Strand. Las magníficas vistas de la bahía, los amplios espacios para correr con tu perro y la limpieza del entorno crean un ambiente tranquilo muy apreciado en la playa. Un lugar tranquilo, que ha conseguido mantenerse fuera del radar turístico hasta ahora. Después de dar un paseo, pasa por Happy Out, un pequeño puesto de comida que vende café caliente y tostadas calientes.

Forty Foot

Situada en la esquina sur de la bahía de Dublín se encuentra Forty Foot, un legendario punto de baño y promontorio que atrae cada año a excéntricos viajeros que vienen de lejos. Se cree que saltar al agua fría del Mar de Irlanda en este lugar tiene enormes beneficios para la salud. Popular los 365 días del año, los habitantes vienen aquí especialmente por centenares el Día de Navidad por lo que ya es un acontecimiento mundialmente famoso. Después de tu chapuzón imprescindible en Forty Foot, no olvides visitar la Torre y el Museo James Joyce, situados en el interior de un Martello donde Joyce pasó unos días en 1904.

Playa Portmarnock

Hay varias razones por las que debes reservar un día en la Playa Portmarnock. A sólo 30 minutos de la ciudad, la playa es fácilmente accesible en transporte público e incluso ha sido galardonada con la Bandera Azul. La arena de este lugar es tan delicada que usualmente se refieren a ella como Velvet Beach. Además, el tramo de 8 km es perfecto para pasear, jugar y nadar. En días que no son demasiado soleados, puedes sentarte en las dunas cubiertas de hierba y hacer un picnic con la familia.

Sandymount Strand

Con dos menciones en el Ulises, Sandymount Strand es sin duda una de las playas más emblemáticas de Dublín y una famosa parada turística entre los Joyceanos. Con una conexión de 40 minutos en bus desde el centro, planifica tu visita durante la marea baja, para que puedas recorrer kilómetros en la playa. Con sus pintorescos senderos, los aficionados a la fotografía suelen venir aquí para captar la Estación de Generación de Poolbeg en la distancia. A lo largo de la costa, encontrarás una Torre Martello y vestigios de un baño centenario.

Killiney Strand

Un atractivo tramo formado por guijarros y arena, Killiney Strand es un lugar divertido para pasear y disfrutar de la impresionante belleza natural de la región. La playa puede ser ventosa, pero es un lugar excelente para nadar, recoger piedras multicolores y pescar durante el verano. Es una de las cuatro playas con Bandera Azul de Dublín, muy querida por sus habitantes. Los buscadores excéntrico deben dirigirse al norte, donde la playa se extiende hasta White Rock Beach. Esta tranquila joya oculta recibe su nombre por las rocas blancas que emergen del mar durante la marea baja.

Pueblos

Independientemente de si un barrio concreto de Dublín es tranquilo, residencial, turístico o vibrante, ahí está el omnipresente sentido de comunidad que recorre todas las calles de la ciudad. Es por eso, para descubrir la esencia de Dublín, es necesario hacer turismo por la ciudad y también mezclarse con sus cálidos habitantes, que suelen ser tan excéntricos y divertidos como la propia ciudad.

Centro de la Ciudad

El centro de Dublín abarca una amplia área tanto al norte como al sur del río Liffey, entre las calles O’Connell y Grafton. Aquí encontrarás todo lo imaginable, desde marcas de alto nivel a lo largo de Henry Street hasta el mercado abierto más rústico de Moore Street. Además de ir de compras, los turistas suelen visitar el centro para adentrarse en el Castillo de Dublín, del siglo XIII, ver el Trinity College, visitar el Museo Nacional del Duende o el Museo Nacional de Cera, y observar a la gente mientras se toman un vaso de Guinness en cualquiera de los bares y restaurantes. Si visitas Dublín por primera vez, el centro de la ciudad es un lugar excelente para reservar un hotel.

Bar Templo

No puedes decir que has estado en Dublín sin pasar unas horas, como mínimo, en el barrio de Temple Bar. Famoso por su cultura de bares, incluido el legendario bar del mismo nombre, el área es realmente animada por la noche. Indudablemente ruidoso y turístico, la arquitectura y calles adoquinadas de Temple Bar siguen teniendo un pintoresco atractivo irlandés que lo convierte en una parada imprescindible. Situado en el sur del río Liffey, Temple Bar no carece de cultura, que se aprecia mejor visitando el Centro Irlandés de Fotografía, el Mercado del Libro de Temple Bar y las numerosas galerías de arte de la región.

Smithfield

Smithfield es el lugar al que va todo el mundo cuando quiere evitar la locura asociada a Temple Bar, pero pasar un rato divertido visitando los bares. La plaza de Smithfield es el corazón del barrio, con muchas actividades durante todo el año. Los eventos y festivales en vivo, como el Desfile del Orgullo y el Caldero de Smithfield, se realizan en la plaza y sus alrededores, donde también se encuentra el famoso cine Lighthouse. Un resto-bar que debes visitar en Smithfield es el lugar temático de los videojuegos, Token.

Stoneybatter

Para que una capital sea considera de moda, tiene que tener un barrio con un ambiente bohemio y hipster. En el caso de Dublín, ese honor corresponde a Stoneybatter. El barrio, que en su día apareció en una canción de las Spice Girls, es hoy un caleidoscopio de lo antiguo, lo nuevo y lo idiosincrásico. No te pierdas la prensa más pequeña de Irlanda, The Lilliput Press, además del mayor jardín interior de Europa, Phoenix Park. También está ahí la calle Manor, con su cadena de tiendas y boutiques vintage. En cuanto a los gourmets, en Stoneybatter rebosan las cervecerías artesanales, cafés dignos de Instagram como el Love Supreme, y lo mejor de restaurantes como el Grano y Ramen Kitchen.

Ranelagh

En contraste a los vecindarios más dinámicos, Ranelagh es un distrito quieto sin afluencia de residentes. Sin embargo, eso no le quita su individualidad, que brilla a través de los grandes murales de arte callejero y las antiguas casas de ladrillo rojo que se encuentran por todos lados. El mercado del pueblo que se realiza de jueves a domingo cada semana, es otra atracción para el público. Los bares en Ranelagh, como el SMYTHS, son ideales para los amantes de la música en vivo, quienes podrán disfrutar de una bebida y escuchar en un ambiente afinado.

Transporte Alrededor de Dublin

El sistema de transporte público de Dublín es fenomenal, y ofrece a los turistas varias formas económicas de viajar dentro de la ciudad y explorar sus suburbios. Tanto el bus como el tranvía Luas son ideales para desplazarse de un punto a otro de la ciudad. El metro DART (Tránsito Rápido del Área de Dublín) funciona especialmente bien cuando quieres salir por la costa irlandesa en busca de pueblos y ciudades encantadores.

Para ahorrar dinero en Dublín, consigue la Tarjeta Leap para Visitantes, que permite viajar de forma ilimitada en varios transportes y puedes recargarla cuando sea necesario. Está disponible en forma de tickets de uno, tres o siete días, y es muy práctica y cómoda de usar. La tarjeta DoDublin, por otro lado, cuesta €35 y es válida por 72 horas. Esto incluye el uso de todos los buses, transferencias al aeropuerto Airlink, viajes en buses turísticos HopOnHopOff, y entradas al Pequeño Museo.

Es habitual encontrar taxis en toda la ciudad; sin embargo, es más barato alquilar un carro si te quedarás más tiempo en Dublín. Varias de las principales agencias de alquiler de carros tienen oficinas en la ciudad, y ahí hay algunas que también ofrecen motos en alquiler.

Por último, Dublin es relativamente amigable-con las bicicletas, con carriles para los ciclistas. Si el clima lo permite, es genial contratar una bicicleta para todo un día. Si no gustas de montar una bicicleta tú solo, únete a uno de los tours de bicicletas de la ciudad para salir a pasear.